domingo, 22 de mayo de 2011

Voto en blanco, escaño en blanco

Algo debe estar pasando porque ni yo me creo que haya ido a votar. Esta vez no había excusa, y no lo digo por los vientos de cambio que soplan, sino porque el colegio electoral me queda debajo de balcón, a escasos 100 metros de mi sofá. El caso es que al salir de ejercer mi derecho al voto, me he encontrado con una pizpireta reportera de Telemadrid cubriendo las elecciones a pie de urna; con sus apuntes, su micrófono y la sonrisa almidonada que ya no era suya.

Al salir del colegio la he visto como nos miraba y salivaba ante la perspectiva de entrevistar a una pareja joven (él con bigote, ella guapa, embarazadísima y sin bigote) participando en tan festiva y democrática jornada.

Demostrando ingenio desmedido me pregunta, sin decir ni buenas tardes:

Reportera - "salen ustedes de votar?",

a lo que le he respondido

Yo- "No, es que me ha quedado pretegnologia para septiembre y tenia clase de recuperación"

Después de una risita de circunstancias ha lanzado otra pregunta intentando ser más incisiva:

Reportera - "¿Quien creen que ganaran las elecciones?"

Realmente no parecía querer saber a quien habíamos votado y yo precisamente era lo único que quería decir, así que he dado un rodeo:

Yo - "Creo que con la ley electoral que tenemos ganaran los de siempre que, aunque son dos partidos diferentes, son el mismo perro con diferente collar"

Tras hilar con finura he proseguido creciendome:

Yo - "yo he votado a un partido que sé que es imposible que consiga representación en Madrid, pero espero que se hagan notar para las generales. Ciudadanos en blanco es la única opción para que los que votábamos en blanco, nulo o nos absteníamos seamos escuchados y ojo que sumándonos todos, somos mayoría¡¡".

Tras una pausa en la que la chica parecía querer que le dijese algo más, o se había dormido completamente, aproveche para hacerla vecina de saco, compañera del metal de los olvidados:

Yo - "supongo que usted se ha abstenido...o en Telemadrid han seleccionado una reportera que viva en la zona para que pueda votar mientras trabaja?"

Demostrando iniciativa y gracejo, me ha respondido:

Reportera - "es que no voto al PP y así se aseguran de que no voy a votar"

Encendido por esta injusticia electoral y mirando a la cámara, como si mirase directamente a lo que hay entre los pellejudos parpados de Espe, he soltado mi discurso anti medios de comunicación:

Yo - "es increíble que los medios públicos sean escaparates de los que gobiernan, es casi peor que los medios privados sean los perros de presa de la pseudo izquierda border line porque eso ni siquiera sabemos lo que nos cuesta. Los medios son cómplices del robo que suponen todos los políticos y sus múltiples y redundantes instituciones"

Y aquí es donde la he cagado, la periodista ha visto que yo atacaba al cuarto poder y se ha asustado temerosa de las consecuencias de que sus jefes vieran que confraternizaba con el enemigo.

No creo que lo emitan. Por mi tono descarado, por mi falta de corrección, porque no doy bien en cámara o simplemente porque nunca ha sucedido. Aunque no hay nada imposible, quién me iba a decir que yo iba a votar algún día.

Algunas pancartas que vimos en Sol ayer fueron muy inspiradoras: "We D'hont like this Election Law" y algunos eslóganes más. Este que me contaron resume un poco el espíritu que se mascaba allí: "Illa Illa Illa, Botin hijolagranputa"

Esperemos que de Sol salga algo concreto, sencillo y práctico, que de verdad cambie algo y, si no, al menos que hagamos ruido para las generales y que ciudadanos en blanco y otras opciones puedan salir para cambiar la ley electoral en cuanto lleguen. Hay cosas que huelen muy mal y son manifiestas, os dejo un vídeo de un señor muy sensato, que lo da todo masticadito y con nombres y apellidos, increíble documento¡¡¡:








2 comentarios:

  1. Me encanta tu descaro y "mala educación". Al igual que tu hacía años que no votaba y hoy al hacerlo me sentí esperanzada. Ayer por primera vez estuve en Sol y el respeto y el orgullo me invadió por completo al ver aquello. No sé qué saldrá de este movimiento, pero por mi parte algo en mí ya ha cambiado, ahora sí tengo la sensación de que los ciudadanos de este país estamos realmente vivos y dispuestos a demostrarlo.

    ResponderEliminar
  2. Para mí ni siquiera es cuestión de cambiar la ley electoral; me bastaría con que las movilizaciones acabaran produciendo ciudadanos que piden cuentas a su gobierno. Estas concentraciones son un poco de esperanza en este país.

    ResponderEliminar